Odio primario

Sobre qué va esta entrada no es misterio, algo tal primigenio como un odio primario, ese odio que te despierta alguien o algo con su mera presencia física, virtual o por mención, ese odio que sale de tus vísceras ante la mera mención de esa persona o cosa.

Soy una persona con mucho odio, pero que mucho odio y hay personas que su mera mención ya generan una inestabilidad y disturbio de mi paz mental, hay personas que, sinceramente... mejor harían en dejar esta existencia, por motu propio o por terceras personas, devuelven las ayudas con traición, con maldad, con puñaladas que te llegan a lo más profundo y se enquistan.

Jamás entenderé cómo puede una persona a quien ayudaste en su PEOR MOMENTO a llegar a traicionarte vil y trapaceramente, da igual la excusa que use, tú le ayudaste cuando nadie quiso y te lo paga con la traición más vil y rastrara, llegándote a hacer sentir un odio biliar por si misma... Si fuera una persona a quien no ayudases, vale (y ni aún así tiene derecho a semejante traición), pero cuando es una persona que necesitó tu ayuda cuando todo el mundo le dio la espalda...

No sé, hay ciertas personas que su mera mención ya me entra la bilis negra y especialmente si esas personas no sólo me han dañado de modo alguno, sino que además han llegado a la traición... hay cosas que puedo soportar, que no tolerar que se me hagan o digan, pero la traición es algo que nunca he perdonado, ni lo haré jamás, cuando una persona te traiciona, SABE lo que está haciendo y sabe que está mal, sabe que está obrando contra ti, le hayas ayudado o no, te está traicionando, toda la confianza, confraternidad o sororidad que hayas mostrado para con esa persona vale menos que lo que consiga al traicionarte y por tanto no te valora en consideración, ha optado por vender vuestro vínculo por algo que nunca será mejor, ningún acto de traición conlleva que quien acometa tamaña vileza consiga para sí un bien mayor, se podrá querer engañar de la forma que quiera, pero ninguna traición aporta nada positivo real y tangible a quien la acomete.

Personalmente creo que quien traiciona ni siquiera se aprecia a si misme, es más dudo que sepa valorar NADA en su debida proporción, ni entenderá jamás el significado de la palabra HONOR, pues esta nunca ha entrado, ni entrará en su vocabulario, quien traiciona no conoce el honor, pues atenta contra el mismo al realizar la traición... Nunca he traicionado (ni lo haré jamás), mis principios van contra un acto tan aberrante, al menos antes quien traicionaba era ajusticiado, quizás no de la forma que mereciere, pero sí de la forma más justa, pero aquello eran otros tiempos y el honor era más vital que los estipendios...

En fin, hay gente que nos saca el odio más biliar y primario, esa gente MERECE que le odiemos, merece que nuestra mente no conciba bien para ellas, tu odio puede ser justificado, por ende, una persona que te causa un odio visceral, habrá realizado algo que tomes como la afrenta definitiva contra tu persona y desde luego no tienes que creer a esa gente que te dice que "no es bueno odiar", el odio puede sarvarte la vida, puede mantenerte a flote cuando el resto te ha fallado.

Es más, a la gente que levanta ese odio, o bien les deseo la inexistencia o que dejen mi puñetera vida en paz, que DESAPAREZCAN de mi entorno y, más sincera aún, si MUEREN de forma trágica y traumática, yo no velaré su entierro, sino que festejaré su muerte, hay un par de personas que de hecho, cuando me entere de su final, voy a emborracharme hasta embotar mis sentidos de tal forma que quede difuminada su existencia, con suerte, quién sabe, hasta las olvido como el tiempo ha olvidado a miles de millones de soldados sin nombre en los libros de historia... no me arrepiento de lo que digo; si mueren, yo voy a sonreír con esa sonrisa sardónica y maquiavélica, voy a paladear la noticia y recrearme en ella... ¿Merecen realmente la muerte? No lo sé y me la pela, sinceramente su muerte es LIBERACIÓN, muerto el perro se acabó la rabia dicen ¿no? pues eso, una vez estas personas muertas, ya habrán dejado de sodomizar mi mente con su putapénica presencia de mierda... y si, a algunas les deseo la muerte, que sea dolorosa o no me es igual, pero la única manera de que dejarán de ser un quiste anal es que MUERAN, porque así desaparecerán y con ello lo que hacen y pudieren hacer en un futuro...

Ésta, la última entrada estos días, os la dedico a todas las pústulas purulentas y sobaqueras que decidisteis traicionarme y os deseo una muerte miserable, dolorosa y tal no, pero sí miserable... ¡Ah! y además en la más terrible de las SOLEDADES, que "disfrutéis" de la soledad más amarga y cruenta en esos momentos, sin NADIE que os socorra, nadie que quiera o necesite de vosotres.

Goodbye, Au revoir, hasta la vista tumor!