Como no siempre mis entradas van a ir acorde con opresiones y demás cosas hoy hablaré un tanto de mí sin dar detalles relevantes, simplemente hablaré y así ordeno un tanto mi cerebro, que estos días lo tengo desordenado.
Normalmente se me suele tachar de antisocial y ser una persona arisca, simplemente porque el ser humano por antonomasia es gilipollas, nos gusta tocar las pelotas por donde pasemos, pero es que además las aglomeraciones me tocan el epicóndilo (esto está situado en el codo), por no decir unas partes mas inoblemente nobiliarias, por normativa general suelo evitar las zonas colapsadas, la gente en aglomeración me agobia y me pone de los nervios, mala hostia, náuseas, ganas de comenzar a eviscerar niñatos... tampoco es que sea muy de interactuar en redes sociales, hay mucho gilipollas opinando sobre temas que no tienen ni puta idea y basta con que estés de buenas, que esas personas decidan darte porculo y no atender a razones o simplemente sienten cátedra.
No me gusta estar con mucha gente alrededor, no entiendo a la peña que sino nota el olor a oragután del cerdo de 20 metros más pallá o ver al típico puto crío gritón y mal criado, o escuchar a esa pija de mierda gritando a los 4 vientos que su hipermegalúcido coche nuevo es superfashion, no entiendo como no le dan ganas de sacarles las putas tripas y estrangularles con ella, sino que disfruta de esas incomodidades.
Vivo en una comunidad de vecinos que son cualquier cosa menos vecinos... Gente que pone la música a todo cipote, que se dedica a dar portazos según se mueven por su puta casa como si quisieran echar las paredes abajo, gente que se pasa haciendo obras dos putos meses seguidos, que arrastran media casa porque así son las cosas y así se las hemos contado, gentuza que a las tantas de la mañana les llama Eutanasio y en vez de usar un tono bajo (por eso de no joder y tal) se ponen a graznar como cuervos en época de cortejo, que a las 3 de la puta mañana se dedican a dar con el puto martillito mientras el resto intentamos dormir, sin olvidar el clásico hijo de homúnculo castrense que se dedica a joder a todo dios y los vecinos se quedan callados como putas ratas y no tienen cojones a decirle nada... así que ahí vas tú a decirle que deje de ser un hijo de chacal malrabiado y el muy soplapollas, te sale con prepotencia, con un arma/herramienta, mientras le dices las cosas se asegura que veas que está dispuesto a usar esa arma contigo porque has ido a joderle tú a él, que él está en su puto derecho a amargarte la puta vida y hacer el ruido que le salga de los cojones, total, el resto de vecinos llevan sin plantarle cojones al mamonazo toda su vida y se esconden como putas ratas acobardadas, no sea que les castigue justamente...
Prefiero que por hacer las putas cosas como se deben hacer bien, me vean como persona problemática y antisocial, que hay que ser muy cobarde y muy mierdas para permitir que un hijo de chacal malrabiado haga de su capa un sallo y tenga todos los putos vecinos en jaque... ¿Sois personas o mierda en bote? Un poquito de sangre en las putas venas ¡joder!
También yo tengo costumbre que he vivido ya por la polla de sitios y si había un vecino de mierda, como en este caso, la gente le plantaba cara y no dejaban que se columpiara, aunque nunca llegaban al extremo de aquí y no se me veía a mí como la puta persona histérica y violenta que planta cara al monicaco felón de turno, pero tampoco es que me interese hacer amistad con los putos vecinos ni aquí, ni en ninguna parte, a decir verdad, preferiría ni tener putos vecinos, irme a un puto chalet en medio del puto monte y no soportar soplapollas, ni gandules ni hijos de putas hienas ecuménicas de los cojones dando porculo... pá qué mentir, la sociedad en conjunto apesta y prefiero estar a mi puñetera y jodida bola en medio del monte, sin nadie a mi alrededor, bueno, una pareja y eso no diré que no, pero que no joda, pero si folle, por el resto; a tomar por culo el puto mundo, a vivir la puta vida sin cánceres humanos, ni tumefacciones de dos patas y que me dejen en paz.
si pudiera, evitaría interacción con los humanos más allá de la imprescindible y necesaria, tampoco es que pueda decir que tenga muchas amistades de verdad, pero esas personas jamás verán este puto blog, ni me interesa a decir verdad, no porque se hagan una idea errónea de mí (que me la pelaría, pero no es el caso), sino porque no me sale de la zona ortal el que vean esto o lo asocien a mí. Punto pelota, ya tengo una edad en que quiero poder desfogarme y cagarme en los muertos de algún chacal, sin que me señalen una actitud a sabiendas de quien soy... así que este, mi blog, lo usaré (como dije de un inicio) para desfogarme, ser un soberano cabronazo o una soberana zorra de mierda, lo que me rote en el momento, como si quiero ser un bastardo malnacido y cagarme en los muertos y la familia de quien me toque las gónadas, total, mi libertad entiende a razón única; la mía y por tanto, si quiero sentirme con ganas de ser un despojo humano, lo seré, me salga del coño o de la punta la polla, porque sinceramente, lo que opine el mundo en estos momentos me come "tó lo gordo" y con todo lo gordo me refiero a lo que me refiero y no con connotaciones sexuales, para eso ya tengo a quién hacerle un repaso.
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