La muerte

Tarde o temprano, a todo el mundo le alcanza la parca y sesga su vida... da igual que estés en las élites, que estés revolcándote en fango, en tu propia mierda o en un charco de tu propia sangre, tarde o temprano vas a morir... da igual lo que luches, da igual si fuiste importante o no, la parca no va a ser más misericorde contigo que lo fue con aquel judío que imploraba a su dios para sobrevivir a Auschwitz y murió, tampoco lo va a ser porque seas buena persona, o un jodido bastardo, a la parca se la bufa como seas en vida, si es tu hora: patalea, grita, muerde, llora, ruega por tu vida, pero vas a morir...

Hay personas o sectores más predispuestos a morir, bien sea por credo, sexualidad, identidad de género, color de la piel, ideología, o un compendio de esos mismos círculos y nuevamente da igual si eres buena o mala persona, te has de joder, ha llegado tu hora final y as de morir...

Estos días mataron a una mujer en Francia, la mataron porque podían y tenían el privilegio de pertenecer a un grupo privilegiado, la víctima pertenecía cuádruplemente a grupo oprimido, porque; ERA mujer, ERA transexual, ERA prostituta y ERA de color, una combinación de factores que propiciaron su asesinato, me da exactamente igual quien la matase, la mató desde su posición de privilegio... la muerte de esta mujer llegó de parte del ODIO, odio sembrado entre otras por el vaticano y sus perros de presa... no murió, la mataron y la parca reclamó su presa.

Una amistad hoy me reveló que su madre había muerto de cáncer, una enfermedad que te va carcomiendo poco a poco o deglutiendo tu vida con ávida voracidad... no sé cómo sería su madre, lo cierto es que creo que mi amistad le apreciaba mucho, pero nuevamente la muerte le alcanzó y no pudo hacer NADA por evitarlo, cuando la muerte llega, la alegría se va tomar por culo.

Yo no pude estar en los funerales de ambas abuelas, es más siempre me he enterado a título póstumo (nunca mejor dicho), ser el bicho raro de una familia de mierda es lo que tiene, que te enteras de la muerte de un familiar en última instancia (si te enteras), en un caso al enterarme sentí tristeza por la señora, si bien no fue la mejor abuela, la otra fue mucho peor y de esa, lo admito; me alegré de su muerte, hubiera preferido que sufriera, que sufriera MUCHO, pues merecía una muerte dolorosa y larga, inmisericorde y brutal... ¿Por qué tanto odio? Bueno, ella condenó al suicidio a dos familiares, uno que no llegué a conocer y una que fue la única persona de mi familia que jamás podré agradecer sus palabras, se suicidaron sí, pero ELLA los mató al empujarles a una depresión más dura de la que ya portaban.

A veces lamentamos la muerte de alguien cercano, o quizás de alguien NO tan cercano, otras veces nos la suda, "solo" es otra muerte, pero otras veces nos alegramos e incluso sentimos alivio. Me la suda mucho que se me tache de insensible, pero ¿Para qué mentir? Creo que las muertes que me han rodeado, salvo quizás 2 o 3, el resto o bien me la ha sudado al pairo o me he alegrado... aunque he de reconocer que en varias ocasiones me he frustrado, alguna persona de la que he conocido su muerte no he sentido que pagase por lo que hicieron, siento que me han estafado, esas personas MERECÍAN morir, pero merecían hacerlo entre agónicos estertores, MERECÍAN un infierno es su último hálito de vida, no MERECÍAN morir plácidamente, su muerte fue una cruel broma... en momentos así echo en falta la ira de un ángel exterminador que les hubiera hecho pasar un calvario.

Sinceramente no sé lo que hay después de la muerte y tampoco me importa mucho, es más, me la bufa bastante, si hay algo, ya lo averiguaré, sino, bueno, el olvido y la inexistencia son tan buenos como cualquier opción metafísica predicha por instituciones religiosas... decía un personaje de una historia que disfrutaba no hace tanto; "La muerte es el final, no hay nada después" y en la misma obra se veía que no estaba tan en lo cierto como quisiera... en fin.

No voy a decir esa soplagaitada de; Vive ahora, que ya descansarás cuando hayas muerto, tampoco tiraré de gilipolleces como que la vida son dos días, la muerte te puede alcanzar en cualquier momento y si has de morir: morirás, sin importar lo que hagas, la muerte es la muerte y NADIE ha eludido jamás a su ulterior momento, pues si mueres, mueres y lo haces para siempre.